Vómitos y fiebre en tu mascota

Los vómitos son relativamente frecuentes en los perros que comen demasiado o demasiado deprisa, o cuando el perro come voluntariamente hierba para limpiar su organismo. En estos casos no hay de qué preocuparse pues es un comportamiento natural.
Si son repetidos, frecuentes o con sangre pueden deberse a otros motivos, como la ingestión de cuerpos extraños o envenenamientos. Si además de vómitos el perro tiene fiebre, son síntoma claro de infección. En todos estos últimos supuestos hay que consultar al veterinario


Fiebre.


Es una defensa del organismo ante inflamaciones e infecciones y siempre debe ser el veterinario el que averigüe sus causas.


Conviene aprender a tomarle la temperatura en casa, pues tanto la elevada como la baja temperatura requieren intervención médica. Para hacerlo se introduce un termómetro lubricado en el ano unos 2 centímetros durante 1 minuto. Los límites admisibles son de 39ºC, por arriba y 37,8ºC, por debajo.


La fiebre se detecta también a simple vista por el aspecto general del perro: con la nariz caliente y húmeda, calor, abatimiento y pelo sin brillo.